Las autoridades mexicanas han recuperado 46 cuerpos de personas de diversas nacionalidades, fallecidas por diversas causas, casi la mitad ahogadas durante su ingreso o tránsito por el territorio entre enero y agosto de 2021, informó el Instituto Nacional de Migración (INM).
Las causas de esas muertes son “ahogamiento, accidentes, armas de fuego, problemas de salud y asaltos”, indica un comunicado del organismo que depende de la secretaría federal de Gobernación, encargada de la polítca interna.
El informe detalla que por ahogamiento ocurrieron 22 decesos y siete más por caídas del tren que viaja hacia el norte o de muros, así como “congestión alcohólica, desnutrición severa y deshidratación en el desierto”.
De las personas identificadas, seis procedían de Honduras, cinco de Guatemala, tres de Haití, tres de Nicaragua, dos de Cuba, y uno de Venezuela, además de tres connacionales, detalla el INM.
La mitad de las víctimas no portaban algún tipo de identificación, por lo que “se encuentran en calidad de desconocidos”.
El personal de los Grupos Beta, que son unidades de socorro distribuidas en las fronteras norte y sur de México, donde transita el mayor número de personas migrantes, detalló que 37 personas fallecidas eran hombres y ocho mujeres, y entre ellas había un menor de edad.
El informe es presentado en el marco de nuevos desplazamientos de personas migrantes en el estado de Chiapas (sur), que partieron la semana pasada en cuatro grupos -el más reciente el sábado pasado- de la ciudad de Tapachula, fronteriza con Guatemala, donde han permanecido entre ocho meses y dos años sin resolver su situación migratoria y salieron en busca de trabajo y vivienda.
El Gobierno federal asegura que la intención de esos grupos es llegar a la frontera norte, ante lo cual realiza “operativos de contención” apoyados por la Guardia Nacional, en los cuales han ocurrido agresiones que ya causaron la destitución de dos agentes.
Casi 20.000 migrantes detenidos en 2021
Organizaciones defensoras de los derechos de migrantes en México, EEUU y Centroamérica denuncian que el INM y la Guardia Nacional han cometido agresiones y violaciones a los derechos de las personas migrantes.
EL INM afirma que en los recientes “operativos de control y verificación” en Chiapas, el INM reitera que “no tolerará actos indebidos y dará seguimiento puntual a las acciones de los agentes federales de migración y en su caso, aplicará la sanción correspondiente”.
El Gobierno de México explica que mantiene una migración “segura, ordenada y regular, en apego a la Ley de Migración y su reglamento”, al tiempo que admite que tiene la obligación de actuar bajo los principios humanitarios y de respeto a los derechos humanos.
Otro informe presentado el sábado 4 de septiembre indica que el INM “ha rescatado en lo que va de 2021, a 19.162 víctimas de diferentes nacionalidades”.
Las organizaciones de la sociedad civil critican al INM por utilizar eufemismos al presentar sus informes.
Por ejemplo, las detenciones son denominadas “rescates”; las deportaciones y “expulsiones en caliente”, que impiden apelaciones y solicitudes de asilo, son reportados como “retornos asistidos” o “voluntarios”; los centros de detención donde los extranjeros son privados de su libertad, “estaciones migratorias”.
El informe indica que “derivado de 250 operativos realizados con otras instancias del Gobierno de México, 318 probables delincuentes y 317 vehículos utilizados en estos ilícitos”.
Los presuntos traficantes de personas fueron puestos a disposición de las autoridades competentes.
El INM indica que “los rescates masivos, en condiciones de hacinamiento pusieron en riesgo de muerte a la población migrante”.
Los cuatro estados donde ocurrieron más detenciones y deportaciones son Veracruz (sureste) con 4.048; Nuevo León (norte), con 3.533; Tamaulipas (noreste), 3.275; y Chiapas (sur), con 2.007 personas interceptadas.
El INM explica que las acciones van encaminadas a la “prevención, atención y combate al delito de tráfico de personas”.
En el operativo más reciente, el domingo pasado el INM reportó que sus agentes y guardias nacionales “rescataron a 162 personas migrantes abandonadas en una bodega”, y que 101 personas viajaban en núcleos familiares y 23 menores de edad iban solos.
Esas personas llevaban cinco días sin alimento y agua, y eran originarias de Guatemala, Honduras y El Salvador, detalla.
