Agentes de la Patrulla Fronteriza en el Valle del Río Grande detuvieron ayer miércoles a 845 migrantes, el grupo más grande de personas detenidas en 24 horas en lo que va del año, de acuerdo con un informe revelado hoy por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP).
La CBP indicó que las detenciones a lo largo del Río Grande en el sur de Texas “demuestran otro mes ajetreado en julio”.
En un comunicado, la CBP informó que el miércoles por la mañana los agentes de la Estación de Patrulla Fronteriza de la ciudad de Río Grande se encontraron con un grupo de 336 migrantes mientras caminaban desde el Río Bravo hacia Estados Unidos.
Hasta ese momento, señala la CBP, ese era el grupo más grande con el que se habían encontrado este verano.
El grupo estaba formado por 328 miembros de familia y ocho niños no acompañados. Muchos de ellos sufrían de deshidratación y agotamiento.
Los migrantes eran en su mayoría provenientes de Guatemala, pero también había ciudadanos de Honduras, El Salvador y Nicaragua.
“Los médicos de emergencia de la Patrulla Fronteriza respondieron y brindaron asistencia a los necesitados antes de ser enviados al hospital para recibir tratamiento adicional”, aseveró la CBP.
Más tarde, agentes de la Estación de Patrulla Fronteriza de McAllen encontraron a otros 509 migrantes.
El nuevo grupo incluía a 331 familiares, 115 niños no acompañados y 63 adultos solteros.
Estas detenciones representan el grupo de migrantes más grande detenido hasta ahora, este año, dijo la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
“RGV Sector comenzó a rastrear grandes grupos en 2007 y el encuentro de anoche es, con mucho, uno de los más grandes hasta la fecha. Este grupo estaba formado por migrantes de El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Ecuador y Venezuela”, indicó la CBP.
“Desde el río hasta los ranchos, nuestros agentes están haciendo todo lo posible para localizar y rescatar a las personas que están perdidas o afligidas, y somos testigos de primera mano de que los migrantes están pasando por lo peor ya que su viaje a la frontera es implacable”, dijo el agente jefe de patrulla Brian Hastings.
