Atención esencial para migrantes: el DIFA en acción
Más de 4 mil 100 niñas, niños y adolescentes migrantes no acompañados están bajo los cuidados del DIF en los Centros de Asistencia Social Nohemí Álvarez Quillay y la Casa del Menor Migrante en Ciudad Juárez. Desde enero hasta septiembre de 2024, el DIF Estatal ha brindado atención integral a un total de 4 mil 165 menores. Estos niños y adolescentes reciben una serie de servicios indispensables mientras esperan una resolución sobre su situación migratoria.
Apoyo integral durante la estancia
En estos espacios, se les ofrece alojamiento, alimentación, atención psicológica, asistencia legal y cuidado constante. Este apoyo tiene como objetivo asegurar que, durante el tiempo que permanecen en el albergue, los menores tengan una experiencia tranquila y segura. Personal de la institución asegura que cada niño recibe un trato digno y se respeta plenamente sus derechos. Además, se les ayuda en su proceso de reunificación familiar y retorno a su lugar de origen.
Los menores tienen una estancia que puede extenderse por hasta tres meses, durante los cuales se les involucra en actividades educativas, recreativas y ocupacionales que les permiten mantener un sentido de normalidad en medio de su situación de movilidad. La atención se centra no solo en el bienestar físico, sino también en el emocional, proporcionando un entorno favorable para su desarrollo.
Diversidad de orígenes y desafíos
Los menores en situación de movilidad son originarios de una variedad de países, incluyendo Colombia, Chad, Ecuador, El Salvador, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, Nicaragua, República Dominicana, Perú y Venezuela. Este panorama ilustra la magnitud del fenómeno migratorio y los diversos desafíos que enfrentan. Por otro lado, el DIFA también ha recibido a 3 mil 745 mexicanos repatriados, provenientes de estados como Guerrero, Chiapas, Durango, Estado de México, Guanajuato, Veracruz, Oaxaca, Puebla y Zacatecas.
La Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes trabaja activamente para implementar los mecanismos legales necesarios para proteger y restituir los derechos de estos menores en situación de movilidad. Su labor asegura que todos los aspectos legales se manejen con seriedad, contribuyendo así a un sistema más justo y equitativo para todos.
La labor del DIF Estatal en la atención de los menores migrantes es un claro ejemplo del compromiso que existe por preservar la dignidad y los derechos de los vulnerables en situaciones de crisis. Estos esfuerzos no solo proporcionan un refugio momentáneo, sino que también sientan las bases para un futuro esperanzador en condiciones más favorables. La atención integral que reciben los menores migrantes es fundamental para su desarrollo y bienestar, ofreciendo un valioso espacio donde pueden soñar con un mañana mejor.
