Una víctima que se identificó como Rizo mencionó que “ese tipo de gente si no pagas el dinero te matan”.
Los inmigrantes que intentar llegar a Estados Unidos no solo se enfrentan al peligro de morir deshidratados en el desierto o quedarse a la mitad del Río Grande, ahora, encaran el temor de ser secuestrados por el crimen organizado.
Un grupo de inmigrantes que cruzaron este fin de semana el Río Bravo desde Ciudad Juárez hacía El Paso señalaron que fueron secuestrados en el norte de México cuando se dirigían a Estados unidos.
Los testigos indicaron que durante varios días fueron privados de su libertad en Durango donde se les exigió entre $10 y $255 para dejarlos en libertad. Dos, de los cientos de secuestrados, dijeron que fueron rescatados por autoridades mexicanas el 7 de diciembre y que, luego de ello, iniciaron una caravana a pie hacia el norte.
Según narraron, un grupo de personas con uniformes de policías detuvieron los autobuses donde viajaban e intentaron extorsionarlos. Después fueron conducidos a unas unidades donde fueron privados de su libertad.
La agencia antes citada mencionó que “la mayoría de las víctimas eran nicaragüenses que han abandonado su país en cantidades cada vez mayores, buscando solicitar asilo y mejores oportunidades de vida en Estados Unidos, convencidos de que es poco probable que sean deportados debido a las frías relaciones entre su gobierno y Washington”.
De acuerdo con el testimonio de un par de inmigrantes, los secuestradores les racionaron la escasa comida y agua, dando prioridad a las mujeres y los niños. Relataron que pasaron noches frías durmiendo en el suelo sin cobijas en lo que parecía ser un salón para eventos.
Un testigo que se identificó como Rizo mencionó “ese tipo de gente si no pagas el dinero te matan”.
Este incidente parecen ser uno de los secuestros masivos más grandes conocidos en México en los últimos años, aseveró Stephanie Leutert, experta en inmigración por la Universidad de Texas, en Austin.
