Para cruzar de manera ilegal a Estados Unidos por la frontera con Texas, los migrantes deben pagarle al narcotráfico, nadie cruza el río Bravo sin que el Cártel del Noreste lo permita.
La situación en México de los albergues para atender a los miles de migrantes que buscan asilo ha alcanzado un punto crítico en la frontera norte, donde se encuentran al borde de la saturación, afirmó el nuevo representante de la Agencia de las Naciones Unidas para Refugiados (Acnur) en México, Giovanni Petri. En esta coyuntura confluyen dos factores: un incremento en la deportación de migrantes desde Estados Unidos y el crecimiento exponencial de solicitudes de asilo en México.
Autoridades mexicanas informaron la muerte de Yuretzi Narváez, migrante venezolana con discapacidad que viajaba en caravana a EEUU.
Migrantes aseguran que los policías encargados de la seguridad del lugar les hacen de todo y hasta les roban el poco dinero con el que entran a este lugar de retención.
Entre las medidas anunciadas por el gobernador de Texas, Greg Abbott, para contener el flujo de migrantes por el río Bravo está la colocación de alambre de púas en “los cruces de aguas bajas en áreas de alto tráfico”.
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El general de Brigada Diplomado del Estado Mayor, Roberto García Brenis, comandante de la 31 Zona Militar en Chiapas, informó que las fuerzas castrenses a través de las 12 coordinaciones del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea resguardan la seguridad de la Frontera Sur.
Una nueva tragedia migrante sacude a Honduras. Una joven de 23 años de edad, embarazada de siete meses, se ahogó intentando cruzar el caudaloso río Bravo, el afluente fronterizo entre México y Estados Unidos, a la altura de la colonia Rosita Garden, en Texas.
El nicaragüense escribió una carta a la Radio Darío,donde laboró hace años y contó todas las dificultades que pasó en su viaje hasta llegar a México
Con lanchas patrullando, tanquetas y efectivos a ambos lados, el ‘operativo espejo’ busca reducir los cruces ilegales de la frontera. Sin embargo, los migrantes siguen lanzándose al río Bravo para pedir asilo en EE.UU. Muchos son menores de edad.
