El Instituto Nacional de Migración (INM) de México suspendió a dos de sus agentes por lo que dijo fue su “actuación indebida” en un operativo en el que migrantes fueron agredidos en la frontera sur del país el sábado.
Las suspensiones, que fueron notificadas formalmente el domingo, surgen después de que se diera a conocer un video en redes sociales que muestra a agentes del INM golpeando y pateando en la cabeza a un migrante para evitar su paso por Tapachula, en el sureño estado de Chiapas.
El hombre formaba parte de una caravana de migrantes, en su mayoría centroamericanos, que intentaban avanzar por México rumbo a Estados Unidos.
Según los videos difundidos, los hechos ocurrieron cuando uno de los migrantes que formaba parte del grupo que avanzaba en la carretera de Tapachula hacia Arriaga se enfrenta a un oficial del INM.
Posteriormente otros dos agentes intentan ayudar a su compañero y terminan golpeando al migrante, lanzándolo al suelo y pateándole la cara.
Por su parte, organizaciones de derechos humanos como la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México y Amnistía Internacional México condenaron los hechos y pidieron al gobierno mexicano actuar “con un enfoque humanitario” ante la llegada de migrantes.
Según medios locales informan este lunes, hubo otro operativo del INM y la GN para intentar desmantelar la caravana de migrantes, formada por varios cientos de personas, que partió de Tapachula el sábado.
De acuerdo al diario El Universal, después de que los migrantes lograron avanzar unos 100 kilómetros desde Tapachula, los agentes del INM y GN lograron detener a unas 100 personas, en su mayoría mujeres con niños, pero gran parte de ellas evadió el operativo.
La migración se ha incrementado drásticamente en México desde 2018, cuando las caravanas de migrantes, principalmente centroamericanos, comenzaron a ingresar al país para llegar a Estados Unidos.
De acuerdo a medios locales, en Tapachula, en la frontera con Guatemala, están concentrados más de 125.000 migrantes, muchos de ellos durmiendo en las calles, esperando que se tramiten sus solicitudes de asilo.
Asimismo, en el estado de Chiapas están desplegados unos 15.000 elementos del Ejército, la Marina y la Guardia Nacional, para detener los flujos migratorios de Centroamérica.