La selva del Darién es una de las rutas más peligrosas del mundo. Miles de migrantes provenientes de diferentes países, como Venezuela, Haití y Cuba, se atreven a cruzarla con destino a Estados Unidos.
Entre Colombia y Panamá se encuentra la selva del Darién, una de las regiones más peligrosas de América Latina. A diario, miles de migrantes arriesgan sus vidas y transitan por este lugar con la finalidad de llegar a Centroamérica y luego ir hacia Estados Unidos. La mayoría de personas que cruza este temido camino son de Venezuela, Haití, Cuba y Senegal, según un informe de Médicos Sin Fronteras.
Cada vez son más frecuentes en redes sociales los videos de migrantes que narran los riesgos que afrontan en su paso por el denominado Tapón del Darién. Pero ¿qué hace tan intransitable a este territorio? A continuación, te lo contamos.
¿Por qué es tan peligrosa la selva del Darién?
La selva del Darién tiene 575.000 hectáreas de extensión. Sus ríos y pantanos la convierten en una zona difícil de transitar. Asimismo, se caracteriza por registrar altas temperaturas y mucha humedad. Casi no se divisa el cielo en esta zona, por lo que es obligatorio transitarlo con un guía, ya que —de lo contrario— la persona se podría ir por horas o días en círculos.
Pero su geografía no es la única característica que lo convierte en un destino mortal o, incluso, un ‘infierno’. En esta región también abundan bandas criminales y grupos de narcotraficantes que con frecuencia asaltan a los grupos de personas que pasan por este punto.
Según detalla El País, aquellos que han cruzado por esta ruta se han encontrado con cadáveres o con víctimas de delincuentes que imploran ayuda. Los puestos de atención de las Naciones Unidas también han recibido en varias ocasiones padres y madres sin sus menores o, por el contrario, niños y niñas que llegan sin sus progenitores.
En este recorrido, existen ‘coyotes’, individuos que cobran por guiar a la población a través de la selva del Darién. Esta travesía implica caminar varios kilómetros y viajar ciertos tramos en lanchas. Por todo esto, suelen llegar a cobrar hasta US$ 500, según el citado medio español.
¿Cuánto se tarda en cruzar la selva del Darién?
El medio elDiario refiere que transitar por la selva del Darién puede tomar entre cuatro y ocho días. Sin embargo, en varias ocasiones, los migrantes han denunciado que los ‘coyotes’ obligan a las personas a ir por caminos insalubres con la finalidad de ralentizar el recorrido y tener la oportunidad de venderles más productos o artículos, ya que en determinados puntos de la región existen comerciantes que ofrecen bebidas u otros artículos.
¿Quiénes son las personas que cruzan la selva del Darién?
Según reveló Médicos Sin Fronteras el último 22 de junio, la mayoría de personas que cruzó la selva del Darién entre enero y abril de 2022 son de Venezuela. De acuerdo con dicha organización, un total de 19.000 pasaron por este lugar durante los cuatro primeros meses del año.
De este grupo, 6.951 eran de Venezuela, 2.195 de Haití, 1.579 de Cuba, y 1.355 de Senegal. La entidad también precisó que, principalmente, deciden ir por esta ruta para llegar pronto a Centroamérica y continuar hacia los Estados Unidos.
En tanto, en 2021, el organismo internacional registró que al menos 134.000 migrantes usaron esta región. Pero, a diferencia de 2022, el 62% fue de Haití, el 14% de Cuba, el 3% de países de África y solo el 2% de Venezuela.
A diario, miles de migrantes cruzan la peligrosa selva del Darién.
¿Qué casos se han reportado sobre la selva del Darién?
Además de pagar a grupos armados, quienes pasan por este lugar saben que deben llevar algo de dinero para que quienes les atraquen no se enfaden si no tienen nada. A las mujeres les toca lo peor, pues se han reportado violaciones, menores que son abusadas por ocho hombres a la vez, grupos a los que paran y escogen “a las más bonitas”.
Médicos Sin Fronteras (MSF), que recibe a los migrantes al otro lado de la frontera, ha llegado a atender en septiembre a ocho mujeres violadas al día. Muchas son asaltadas para buscar que en sus partes íntimas no escondan los ahorros; pocas en los grupos se salvan de abusos mayores.
“El Darién no se lo deseo a nadie, es duro”, relató un migrante que viaja hacia EE. UU. o Canadá en busca de mejores condiciones de vida, en medio de un aumento del flujo migratorio regional.
