La frontera norte de México ha sido testigo del arribo de migrantes que formaron parte de la caravana más numerosa del año, proveniente del límite sur del país. Sin embargo, su camino hacia Estados Unidos se ha visto obstaculizado por operativos y barreras implementadas tanto por las autoridades mexicanas como estadounidenses.
Organizaciones denuncian violaciones a los derechos humanos de los solicitantes de permisos de tránsito o asilo.
Cientos de migrantes de Haití, Venezuela, Cuba, Ecuador, Colombia y otras regiones del mundo, han desistido de caminar en caravanas desde la frontera sur de México hasta Estados Unidos, para en su lugar entregarse al Instituto Nacional de Migración (INM).
Migrantes del sur de Latinoamérica desistieron de caminar en caravana y se entregaron al INM.
Abandonan filas y dejan a medias su protocolo de legal estancia, enganchados por promotores de expediciones y traficantes de humanos
