Ecuatorianos han resultado heridos o han desaparecido en los caminos usados de forma irregular para migrar a EE.UU.
Estados Unidos y México tienen 3.000 km de frontera, 1.000 están cercados con un enorme muro. Para cruzarlo, los traficantes de personas ponen un precio adicional. Al lado sur de la estructura hay escaleras para subir. Pero al otro lado no hay quién los ayude. Deben saltar.
Fernando Baca, de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, cuenta a Televistazo que son los agentes los que deben dar primeros auxilios a los migrantes que tienen lesiones expuestas y fracturas y que no pueden avanzar hacia el interior de ese país.
Migrantes mueren ahogados en el Río Bravo o canales de riego
Existen otros casos en los que los migrantes se lanzan al Río Bravo. Unos nadan y otros usan botes artesanales. También deben cruzar amplios canales de riego. Hay naufragios y al menos 500 migrantes han muerto en los últimos años en su intento de evadir los controles.
Con la implementación de la ley conocida como Título 8, que controla más la migración irregular, miles de migrantes intentan cruzar por estos pasos peligrosos para evitar detenciones.
Los agentes fronterizos indican que los riesgos para la vida y seguridad de las personas son altos. Ricardo Barragán, supervisor de la Patrulla Fronteriza, advierte otro tipo de peligro.
Hay migrantes que logran cruzar estos obstáculos, pero que se desorientan en el desierto o en ranchos particulares. Por eso se han instalado alarmas que tras su activación permiten la ubicación. Quienes las usan presentan cuadro de inanición.