El enorme número de migrantes varados en la frontera de México con Estados Unidos ha provocado un brote de al menos 70 niños contagiados de varicela, lo que les ha impedido asistir a sus citas de asilo para ingresar a suelo americano.
Este acontecimiento ha provocado protestas de parte de los migrantes ubicados en el albergue Ágape Misión Mundial en Tijuana, justo en la frontera con California, donde los familiares de los menores están exigiendo el abastecimiento de vacunas, ya que sin ellas y con los menores contagiados están perdiendo sus citas de asilo.
El director del albergue, Albert Rivera Colón, comentó que desde el comienzo del brote las autoridades han hecho caso omiso, lo que ha empeorado la situación del refugio, pues el brote puede extenderse.
“Uno de los puntos principales de la protesta es el tema de la salud, ya que el departamento encargado no maneja las vacunas contra la varicela, pues nos dicen que sólo la Federación puede otorgarlas”, comentó.
A pesar de que el gobierno de EE.UU. donó 2 mil vacunas a México, los migrantes no han podido tener acceso a ese recurso, lo que representa una violación a los derechos humanos. Por otro lado, el director también agregó que no es la primera vez que sucede un brote en el albergue y que durante el año pasado tuvieron que permanecer 8 meses en cuarentena debido a la ausencia de vacunas.
Este problema se suma al repunte del flujo migratorio que se está observando en la frontera mexicana tras el fin del llamado Título 42. Al finalizar esta medida los encuentros de migrantes habían caído un 50% entre los meses de mayo y junio, sin embargo, al siguiente mes se incrementaron en 36%, según datos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Albert Rivera Colón hizo un llamado al gobierno mexicano para que se coordine con la aduana y que se empiecen a distribuir las vacunas y lleguen a los niños, pues no quieren volver a pasar 8 meses en cuarentena como hace un año.
Al no tener acceso a las vacunas no sólo tienen que enfrentar la pérdida de sus citas humanitarias, sino paliar la enfermedad con calmantes para el dolor y cremas para secar las ronchas, además de tener que acudir a médicos particulares para tratarse.