Durante el mes de marzo del presente año, la cifra récord de más de 15,000 migrantes ecuatorianos ha sido detenida y expulsada desde Estados Unidos, marcando un hito sin precedentes en comparación con años anteriores.
A pesar de los riesgos inherentes al intento de ingresar ilegalmente a Estados Unidos, las estadísticas de la oficina de migración de dicho país revelan un aumento significativo en la detención, deportación y expulsión de ecuatorianos durante el mes de marzo. Mientras que el año anterior en el mismo periodo se registraron 7,260 casos, este año la cifra se ha duplicado, alcanzando los 15,951, según Willian Murillo, líder de la organización 1800 Migrante, que proporciona asesoría legal.
Durante todo el año 2023, un total de 117,000 ecuatorianos fueron detenidos, deportados y expulsados de Estados Unidos debido a su situación migratoria irregular. En lo que va del presente año, esta cifra ya asciende a 78,000. Muchos de estos migrantes atraviesan la selva del Darién, otros optan por rutas a través de Centroamérica e incluso el Caribe en su desesperado intento por alcanzar su destino.
Principalmente provenientes del austro ecuatoriano, de provincias como Azuay, Cañar y Loja, seguidos por migrantes de Los Ríos, Santo Domingo de los Tsáchilas y Guayas, estos ecuatorianos enfrentan un arduo camino en su búsqueda de una vida mejor, aunque no todos logran llegar a su destino final.