Caracas, Venezuela – Con un gesto que ha generado diversas reacciones, el gobierno venezolano anunció este lunes la repatriación de 8,743 ciudadanos venezolanos que se encontraban en centros de detención migratoria de EE.UU., bajo custodia del ICE.
El presidente Nicolás Maduro, durante su programa televisivo semanal Con Maduro +, detalló que estos migrantes –muchos de ellos en condiciones vulnerables– fueron retornados a través del plan Vuelta a la Patria, impulsado por su administración.
Entre los repatriados hay 6,117 hombres, 1,444 mujeres, 623 niños, 559 niñas y 52 mujeres embarazadas. Las cifras reflejan no solo la magnitud del retorno, sino también la complejidad humana detrás de estas deportaciones.
Maduro aseguró que en el primer semestre del año se han realizado 47 vuelos de repatriación, con un promedio de 8 vuelos mensuales. Uno de los más recientes fue el del viernes pasado, cuando 251 venezolanos fueron transportados en un vuelo procedente de Houston, Texas. Entre ellos venían siete niños que, según el gobierno de Caracas, habían sido “secuestrados” por las autoridades estadounidenses.
Ese mismo día, también fueron recibidos 252 migrantes deportados desde El Salvador, quienes habrían estado detenidos desde marzo. Este retorno masivo se logró tras una inusual negociación entre ambos países, que incluyó un intercambio humanitario en el que también fueron liberados presos políticos en Venezuela y diez ciudadanos estadounidenses retenidos en la nación sudamericana.
Pese a que Caracas y Washington no mantienen relaciones diplomáticas, el diálogo fue facilitado por el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, quien actuó como intermediario clave, según fuentes del chavismo.
