Panamá ha registrado un aumento significativo en la cantidad de migrantes este año. Ya son más de 400,000 personas que han atravesado la desafiante Selva del Darién, buscando una mejor vida. Si desglosamos estos números:
La mayoría proviene de Sudamérica:
- Venezolanos: +252,000
- Ecuatorianos: 47,724
- Colombianos: 13,404
Siguiendo en la lista tenemos:
- Antillanos: +39,200
- Asiáticos: 27,878
- Africanos: 7,389
Además, es importante mencionar que de todas estas personas, un 25% son niños y jóvenes. Imagina eso, ¡muchas familias completas están en movimiento!
La situación es seria y supera las cifras de años anteriores. En 2022, se registraron 248,000 migrantes y en 2021 fueron 133,000. Las autoridades incluso creen que podría llegar a ser medio millón para el final del año.
Pero el viaje no es fácil. La Selva del Darién es peligrosa. En lo que va de año, al menos 37 personas han perdido la vida allí. Y eso sin contar los riesgos de robos, asaltos y otros delitos. Panamá, a pesar de los desafíos, ha hecho esfuerzos para ayudar. Han invertido más de 70 millones de dólares en asistencia médica y alimentaria para estos migrantes.
Debido a esta situación crítica, las autoridades están pidiendo más ayuda internacional. Y aunque Panamá ha trabajado para proteger a los migrantes, han decidido intensificar las deportaciones, sobre todo de aquellos con antecedentes penales.
Otros países como México y Estados Unidos también están tomando medidas similares. Ambos buscan implementar estrategias más fuertes en sus fronteras para controlar el flujo migratorio.La situación está complicada. Panamá y otros países están haciendo lo que pueden, pero se necesita más ayuda y cooperación para garantizar la seguridad y bienestar de todos estos viajeros.