Lo que parecía una noche de diversión en un club clandestino de El Monte, California, terminó de manera inesperada con una redada de las autoridades migratorias. El operativo, realizado el 19 de julio por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), culminó con ocho personas detenidas, entre ellas al menos un ciudadano mexicano, según confirmaron fuentes oficiales.
El club, que funcionaba de manera ilegal, estaba bajo investigación por posibles vínculos con crimen organizado. Durante la redada, se incautaron armas, narcóticos, material para consumo y miles de tarjetas de regalo alteradas, presuntamente utilizadas en esquemas financieros ilícitos. Este hallazgo refuerza cómo muchos espacios de entretenimiento clandestinos pueden estar relacionados con actividades riesgosas que terminan afectando a quienes acuden sin conocer lo que sucede detrás de las puertas.
Los testimonios recogidos en medios locales señalan que la redada tomó por sorpresa a los presentes, quienes no esperaban que un operativo de esta magnitud se llevara a cabo en un sitio de ocio. En cuestión de minutos, la música y la fiesta dieron paso al desconcierto, mientras los agentes de ICE ingresaban al lugar y aseguraban a los asistentes.
Actualmente, las personas detenidas enfrentan procesos de verificación de identidad y situación migratoria. Las autoridades estadounidenses no descartaron más investigaciones en torno al funcionamiento del club y a las actividades ilícitas que presuntamente se realizaban en su interior.
